La trabajadora por cuenta propia Jordany Cardoso de Freitas, de 36 años, dejó todo lo que hacía para acompañar a su suegra Vaneci Maria Silva Nascimento, de 57 años, diagnosticada con cáncer de endometrio, un tumor que se origina en el revestimiento de la parte interna del útero. .Sin radioterapia en Roraima, la nuera decidió, hace tres meses, llevarla a tratar la enfermedad en la Fundación Centro de Control Oncológico del Estado de Amazonas (FCecon).Pero el tratamiento contra el cáncer se detuvo la semana pasada porque el acelerador lineal L1 está roto.“Sabemos que el compresor tenía un problema y necesitaríamos comprar uno nuevo para poder reemplazarlo.No es sólo una situación de Vaneci, sino de muchos pacientes que son de Boa Vista y también de aquí de Manaus”, dijo Jordany a Folha.La paciente aún necesita tres sesiones de radioterapia y la nuera relata que la vida ha sido difícil en la capital de Amazonas.“El costo de vida aquí es muy alto, con renta, comida, medicamentos, transporte y estamos aquí en esta situación, lejos de nuestra familia.Los pacientes ya tienen ese problema de salud y su separación de la familia también provoca un trastorno psicológico, afecta el aspecto emocional de estar tanto tiempo lejos de la familia”, lamentó Jordany.Uno de los primeros síntomas que notó Vaneci fue un sangrado vaginal continuo.Desde el diagnóstico se sometió a una cirugía para extirparle el útero y ahora está a la espera de que le arreglen la máquina FCECON para continuar con el tratamiento.También a la espera de que se resuelva el problema está la jubilada Ieda Schramm Rodrigues, de 62 años, diagnosticada hace más de un año con cáncer en el canal rectal.La acompaña su hija, la trabajadora por cuenta propia Lilian Schramm Rodrigues, de 29 años, quien relata que la espera puede debilitar aún más la salud de su madre.“Hicimos algunos procedimientos allá en Boa Vista, como la cirugía de colostomía, luego vinimos a hacer radioterapia y quimioterapia aquí en Manaus.Pero la máquina se ha estado rompiendo casi todas las semanas y mientras usa la bolsa, su barriga está muy quemada.Hay días que no puedo ni ponerle la bolsa por el dolor que siente”, dijo.“Estamos pidiendo ayuda, porque no es fácil”.En una nota, FCecon informó que el acelerador lineal volvió a funcionar el viernes (10) por la tarde y que el servicio de radioterapia destacó que los pacientes programados para el dispositivo ya fueron citados.