Chaquetas bomber 'made in Bilbao': Una bilbaína crea las chaquetas bomber que no pueden faltar en tu armario | El Correo

2022-06-03 19:51:17 By : Ms. Xia Jason

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Ainhoa Escalona crea las chaquetas bomber que no pueden faltar en tu armario.

De no haber sido por el coronavirus, Ainhoa Escalona Uribe probablemente no estaría hoy confeccionando chaquetas bomber. Esta prenda de inspiración militar nació en 1917 durante la Primera Guerra Mundial. Utilizada por los pilotos para protegerse del frío, terminó evolucionando hasta el punto de convertirse en el modelo más moderno que conocemos actualmente. Las bomber forman parte del circuito de la moda, y se ven por las calles tanto en hombres como en mujeres. La protagonista de nuestra historia lleva apenas un año con su proyecto de chaquetas, que surgió de la manera más espontánea. Hace diez años se quedó embarazada. Por aquel entonces, no tenía muchos antojos en cuanto a comida se refiere, pero sí la imperiosa necesidad de hacer tres cosas: cocinar, limpiar y coser. «A mi pareja le regaló el Olentzero una máquina, y yo me tiré cinco días cosiendo todos los metros de tela que encontré por casa», rememora esta bilbaína de 43 años. Tras dar a luz, esa máquina cayó en el olvido, y fue puesta a buen recaudo en un cajón hasta nuevo aviso. Casualidades de la vida y con un confinamiento de por medio, la sacó de su escondite, y removió sentimientos encontrados en esta emprendedora. «La desempolvé, y empecé a ver vídeos en YouTube y a crear cojines, carteras, mochilas… Y ya una vez nos pudimos mover, me apunté a clases», explica. En abril de 2021, después de hacerse para ella una primera chaqueta en lana, decidió regalarle a su hermana otra por su cumpleaños. «Era viernes y estábamos de celebración por el Casco Viejo. Dando una vuelta ya nos paró una primera chica, que terminó llamándome y encargándome una bomber roja de estilo japonés. Y así comenzó todo, gracias al boca a boca», recuerda esta diplomada en turismo que se ha recorrido medio mundo.

Desde que terminó la carrera a los 21 años, Ainhoa se dedicó a una de sus grandes pasiones: viajar. Su primera parada fue Londres, donde trabajó en diferentes empleos durante dos años y medio, fue desde camarera y friega platos a dependienta de moda en Oxford Street. La joven del barrio de Solokoetxe regresó después a Bilbao para dejar sus cosas e irse a Asia durante unos meses. El amor llamó a su puerta cinco años más tarde, y fue entonces cuando decidió instalarse definitivamente en el botxo y hacerse cargo del negocio familiar. «Mi madre estaba embarazada de mi cuando compraron un bar. Yo soy la cuarta de cinco hermanos, y me vino un poco de rebote», señala. Su hermana y ella llevan ya casi dos décadas al frente del 'Bar Curro', al cual acude mucha clientela fija del ambulatorio y del centro de salud de la zona. Pero entre pintxo y pintxo, Ainhoa saca tiempo para crear en su casa sus famosas chaquetas bomber, «totalmente personalizadas, de algodón cien por cien y con forro interior». Tras vender su producto en algunos 'markets', a los que acude con un pequeño muestrario, asegura que su marca está ahora mismo en pleno desarrollo.

La emprendedora funciona totalmente bajo pedido, de ahí que las exclusivas piezas cuesten 100 euros. Sus clientes le dicen la talla -confecciona desde la S hasta la XXL- y ella calcula el largo a meter en base a su altura. ¿El plazo de entrega? «Normalmente, dos semanas si todos los tiempos se cumplen, aunque las telas japonesas a veces se retrasan», cuenta. Ainhoa compra el tejido en Sevilla y en Barcelona, y enseguida se pone manos a la obra. «Los diseñadores de las telas son americanos y trabajan con un ancho de 1,10 metros, al contrario que los europeos que funcionan con mínimo 1,40. Al final, necesito más tela de lo que la gente piensa. Casi dos metros por chaqueta», matiza. Sus primeras clientas, amigas y vecinas, consideran un acierto invertir en una de sus bomber, que cautivan desde su perfil profesional de Instagram. «Opino igual que ellas, me parece que son como para tener unas cuantas en el armario y combinarlas un poco con todo: vaqueros, vestidos... A mí realmente me cuesta quedarme con una, aunque la que más he utilizado es la de geishas en color rosa», añade esta amatxu bilbaína, que también compra desde hace poco tejidos en la tienda 'Princess Courts' de la calle Dos de Mayo de Bilbao.

La diseñadora tiene otro apasionante proyecto entre manos previsto para el curso que viene, y que espera coseche tanto éxito como sus bomber. «Por el momento, no puedo desvelar nada, ya llegará, pero estoy muy ilusionada. A la vida le pido seguir como hasta ahora, y desde luego mucha salud para toda mi familia», ríe. Este sábado fue la oportunidad perfecta para conocerla mejor, ya que participó junto a otras mujeres emprendedoras y artesanas del barrio de Solokoetxe en un evento. «Hay unos cuantos talleres que nadie conoce. Se fueron llenando las lonjas municipales del ayuntamiento, lo cual está genial», incide Ainhoa, mientras cuenta de forma divertida que se va esta semana a Grecia a desconectar la cabeza y descansar con la familia.